Esta semana estamos dulcísimos en
la Cocina de Zeltia! La inspiración me llegó con el tímido sol que no acaba de
mudarse por estos lares (cosas de los veranos gallegos). Pero vamos, que este
año el invierno no nos quiere abandonar!
Sin embargo desde este rinconcito argentino en medio de esta verde Galicia, hemos decidido ponerle “al
mal tiempo buena cara”, como dice el refrán. No solo
de pizzas y empanadas vive el hombre, …de tartas (tortas) y puddings (budines) también!
Así que amigos, si llueve y hace frío
en pleno verano, no importa! Os dejo una rica opción: una rueda de cafecitos
con este Pudding.
¿Qué tiene de
especial además de estar hecho con amor, en mi cocina y con todo el mimo
del mundo? Que está de vicio!!!
…Sí, lo
sé, “no tengo abuelas” jejjeje. Pero solo repito lo que han expresado quienes lo
han probado. A eso le sumo que en casa, cuando me descuido, saquean las reservas
y se los acaban en un santiamén! Así que os va el aviso: haced vuestros pedidos, no sea que les dé el antojillo y ya no quede ni uno!
Les cuento que el Pudding está
elaborado con jugo y ralladura de naranjas, de modo que su color y sabor está bien definido. La preparación es
absolutamente casera, sin colorantes, ni acidulantes, ni aromatizantes
artificiales. Su textura es esponjosa gracias al merengue y la cobertura es de fino
chocolate para taza, lo que lo hace más cremoso y sutil, las naranjas de vista
han sido previamente caramelizadas, lo que aporta un exquisito contraste con el
chocolate.
Os apetece?